Tanto tiempo...tantas cosas...

Mucho tiempo sin escribir, sin dignarme siquiera a mirar el blog...y las cosas se suceden con un ritmo vertiginoso, tan rápido que cuesta, a veces, asimilar lo que va sucediendo...pero bueno, todo sigue un curso "normal"...es decir, altamente agitada y revuelta...como la vida misma...cosas buenas y de las otras...y ciertas inquietudes o temores de que pase algo que no quiero...un cierto temblor de piso, que puede ser malinterpretado y que lleva a confusión...una escritura críptica, que revela mucho y a la vez dice nada...el juego constante de decirlo todo con el silencio más elocuente. Una vez más soy yo...lo que ciertamente no es algo tan útil, pero tampoco tan fútil...he renacido con más ahinco que nunca, con la misma fuerza y dando nuevamente la pelea...y, por supuesto, equivocándome en el camino. Lo cierto es que también en el proceso algunas personas han ido quedando atrás, lo que siempre conlleva una pena u alivio, según sea el caso...el problema es cuando las cosas requieren un tratamiento inmediato y se extienden...no entender cabalmente las causas que originan ciertas situaciones o sentimientos...la tendencia inequívoca del ser humano a complicar lo sencillo, a confundir a quién tienes al lado y dañar a los que amas...y no es maldad, no siempre al menos, solo es hacer lo que no deberías...justamente pronunciar o escribir lo que deberías callar o no ejecutar los actos que provocan el estupor del otro...o de uno mismo...hacer lo que prometiste no volver a cometer...empoderarte de los espacios y las personas que no corresponden, darlo todo, quedarte con las manos vacías y un corazón empobrecido...pero nada es tan malo... Bueno, compañeros y compañeras...ya muchos sabrán a que atenerse...y quién no lo sabe, que se cuide...o que no juzgue...el conocimiento entre personas debe ser mutuo....por ende, no hagas que te traicione la impulsividad...podrías salir para atrás...una vez más.